Rondan el cementerio

viernes, 18 de febrero de 2011

SIN CONTROL capítulo 5

DIA 3 (noche)

Llegué justo a tiempo de coger el bús. Decidí llamar a Miguel para contarle lo que me había pasado. Estaba tan emocionado que no era capaz de encontrar su nombre en la guia del teléfono. Miré por la ventana del bus al mismo tiempo que me acercaba el móvil a la oreja, escuchando los tonos de llamada, para ver como nos alejábamos de la casa de Eva, deseando volver lo antes posible.
Miguel no te lo vas a creer - le dije en cuanto contestó al teléfono - ha sido increible, ha sido fantástico, uno de los mejores dias de mi vida, ha salido todo perfecto, dioooos, es que no me lo creo... es... es...
Tranquilo, tranquilo - dijo Miguel - cuéntame lo que te ha pasado y procura respirar al mismo tiempo
Se llama Eva, y es preciosa tio, es increible... le gustan las mismas cosa que a mi - le dije emocionado - y nos lo hemos pasado pipa esta tarde. Joder, tiene una máquina del double dragon en el salón de su casa...
¿Una máquina de qué? - preguntó Miguel
Y tiene el cuerpo mas bonito que he visto en mi vida... su piel es tan cálida y suave... - le dije a Miguel mientras en mi mente Eva me sonreía desde la cama
¿Que tiene un cuerpo....? Un momento - dijo Miguel - pero.... ¿os habeis acostado ya?
Ha sido fantástico tio, creo que estoy enamorado - le respondí - estoy flotando en una nube
A ver... que me situe - dijo Miguel - quedas con una chica que conoces hace dos dias como quien dice y en la primera cita ya os acostais...
¿Qué pasa? ¿hicimos algo malo? - le pregunté - tio... tanto ella como yo somos adultos ya... ambos hemos tenido otras relaciones... creo que ya sabemos lo que hacemos... ¿ o tú nunca te has ligado a ninguna chica en la disco y te has acostado con ella esa misma noche?
No, si no lo digo por nada malo , lo digo por que me das envidia.... - dijo Miguel - y claro que he ligado con muchas y me he acostado con ellas... lo malo es que a la mayoría no las vuelvo a ver
Pues yo si, tio, yo quiero volver a verla - le dije - si mi madre no me llega a decir lo de ir a verla....
Gracias tio, gracias... - dijo Miguel - creo que fui yo el que te llevó a la cafetería donde trabaja... y creo que fui yo también el que te llevó el otro dia a la discoteca donde casi te enrollas con ella si no llega a ser por el gilipollas de....
Dejalo.... ni lo menciones... ahora mismo estoy tan bien que no quiero que nada ni nadie me joda lo que queda del dia - dije yo - es curioso... mi superstición sobre el papel higiénico... ha fallado
Oh, vaya, no empieces con esa guarrada tuya del papel higiénico - dijo Miguel - lo normal es que salga manchado siempre tio... puaaag, que cerdo, yo ni miro el papel tio, me limpio y lo tiro
¿Y como sabes que tienes el culo limpio? - le pregunté
Joder... ¿tenemos que hablar ahora de esto? - dijo Miguel - iba a cenar....
Da igual, acabo de llegar a mi parada, entro ahora a trabajar - le dije - mañana podiamos quedar para comer y te exponía mi teoría sobre las consecuencias de tener el culo sucio
Si quieres quedamos - dijo Miguel - pero no pienso hablar de culos contigo
Hasta mañana tio, gracias por ser mi amigo - le dije
Capullo con suerte, hasta mañana - dijo Miguel antes de colgar
Me bajé del autobús e inice mi camino hacia el 24 horas con una enorme sonrisa en la cara. Al llegar a la tienda Luís me estaba esperando.
Lo siento, llego 10 minutos tarde, no volverá a pasar - le dije
Pensé que te había pasado algo - dijo Luís
Si, me pasó algo, pero algo maravilloso - le contesté
Te brillan los ojos - dijo Luís - o estás bebido o estás enamorado
Venga, vete a casa - le dije sonriendo - ya me ocupo yo del garito este hasta las 7 de la mañana
Cuando venga Olga pregúntale que tal su negociación con el Sr. Peleteiro - dijo Luís
Eso es cosa mía y de Olga - dijo el Sr. Peleteiro entrando en el local - a ustedes no les importa los más mínimo, pero sepan que me estoy planteando poner los turnos de 12 horas... con dos personas podría cubrir los turnos... hoy a trabajado usted 2 turnos seguidos ¿no Luis? eso son 16 horas seguidas... entonces 12 horas hasta sería fácil para ustedes....
Eso no puede ser... y el día libre semanal - le dije yo
Siempre se lo podría pagar a mayores.... no sé, ya se nos ocurrira algo - dijo el Sr. Peleteiro con una amplia sonrisa en la cara - total, sería pagarles 4 días al mes a mayores a cada uno... seguiría ahorrando dinero al prescindir de los servicios de Olga....
¿A qué ha venido? - le pregunté mirándole con odio y pensando en decirle cuatro cosas antes de mandarle a la mierda
Pues a por la recaudación del fin de semana - dijo con mirada seria - no me gustaría nada que vinieran los rumanos y se la llevaran. ¿Están todos los sobres de dinero dentro de la caja fuerte?
El el despacho del Sr. Peleterio habia una caja fuerte con una ranura por la que metiamos los sobres con la recaudación del día.
Si lo que quiere saber es si ya metí el mio, la respuesta es si - dijo Luis
Estupendo, voy a mi despacho a recogerlo y vengo ahora - dijo el Sr Peleteiro
Pero..... parese a pensar un momento - le dije yo - si vienen a robar y no encuentran más que los 150 euros en billetes y monedas que tengo yo ahora para empezar el turno... ¿no cree que se pondrán violentos conmigo pidiendo más?
Ummm, tiene usted razón, pero tengo una idea, ahora se la comunico, déjeme unos minutos y ahora vengo - dijo el Sr Peleteiro caminando hacia su despacho
Bueno tío, mañana vengo yo de tarde y noche y tu descansas, gracias por el favor - me dijo Luís
De nada tio, para eso están los compañeros, aunque las horas seguidas te las estás tragando tú - le dije yo
Si, parece que habrá que acostumbrarse... ¿no? - dijo Luis guiñándome un ojo
Joder, no me acostumbro a tener dos semanas seguidas de tarde... como para tener que hacer 12 horas al día.... mañana habló con Olga a ver que le pasó. Venga, nos vemos - le dije a Luis mientras se marchaba
Gracias tio, que pases buena noche - dijo Luís saliendo de la tienda.
A ver... - dijo el Sr. Peleteiro saliendo de su despacho con una cajita metálica - en esta caja hay 2000 euros, guárdela debajo del mostrador donde no se vea. Si vienen y se ponen tontos se la dá y problema resuelto, con ese dinero quedarán más que contentos. ¿Se queda más tranquilo asi?
Por supuesto - le dije yo mirando la caja metálica - sólo la usaré en caso de emergencia
Bueno, la verdad es que un robo ya es un caso de emergencia - dijo el Sr. Peleteiro con gesto serio - pero esperemos que no tenga que usarla. Está cerrada con llave... dígales que usted no la tiene, que esta en poder de el dueño, por lo menos que le cueste trabajo abrirla.
Gracias señor - le dije
De nada hombre, total, si se llevan los 2000 euros no pasa nada, el seguro me los reembolsará de nuevo. Que tenga una buena guardia - dijo el Sr. Peleteiro abandonando la tienda.
La verdad es que me sorprendió que dejará aquella caja metálica con dinero. Yo tenía el sitio perfecto para esconderla. Debajo del mostrador había 3 cajones. Al sacar el último cajón del sitio quedaba un hueco en el interior del mueble. Alli guardaba mi pequeño tesoro para hacer los turnos de noche mas llevaderos. Una gameboy advance SP con un juego que me estaba costando acabar. El tales of phantasia. Siempre que luchaba contra el bicho final me mataba, y eso ocurría siempre que estaba de noche. Saqué la consola del fondo del mueble, metí la caja metálica dentro y volví a colocar el cajón. A partir de ese momento los clientes que venían a comprar eran cada vez menos numerosos y a eso de la una de la mañana ya no venía ni Dios. Entonces encendí la consola y me puse a jugar.
Joder, puto Dahos, siempre me mata - grité al cabo de 15 minutos - tengo que subir de level , es la única solución
Pasé 2 horas seguidas luchando con todo bicho que me saliera al paso para subir de level y hacerme más fuerte. Acabaría con Dahos de una vez por todas.
¡Voy a por ti! - grité desde el mostrador alzando el puño cuando una extraña mujer entró en la tienda. Iba toda despeinada y llevaba a un recién nacido en brazos completamente tapado con una manta. Me quedé mirándola fijamente por que me sorprendió su visita a las 3 de la mañana.
Tranquilo - dijo ella como avergonzada - verás, vivo aqui al lado, dos calles mas arriba, por eso vengo con estas pintas y bueno, traigo a mi bebe por que no podía dejarlo sólo en casa... el pobre sigue durmiendo, ni se entera.
Si... - dije yo sin dejar de sorprenderme - y....
Es que me ha entrado un dolor de cabeza terrible y no me quedan aspirinas en casa... ¿tendrás algo para venderme? - dijo ella acercándose al mostrador - es que no lo aguanto, me duele una barbaridad y no soy capaz de dormir
Verás - dije yo dejando la consola bajo el mostrador mirando de reojo a Dahos que parecía reirse de mi- esta tienda es mas bien de alimentación y prensa... para comprar medicamentos deberías de buscar una farmacia de guardia. Yo lo siento mucho pero no puedo ayudarte.
Vaya, no pasa nada, me lo imaginaba - dijo ella - pero es que con el niño no quería ir muy lejos a estas horas y esta tienda me pillaba cerca... 
Lo siento - le dije de nuevo
Cuando la mujer se disponía a abandonar la tienda con su bebe en brazos un hombre la empujó cortándole el paso. Trás él, entraron 2 hombres más. Todos llevaban guantes negros. Uno de ellos bajo la verja de la entrada y me miró friamente.
Oiga, no puede hacer eso - grité yo
¿No puedo hacer qué? ¡ya lo he hecho! ¿o no lo ves?- gritó aquel hombre con acento extranjero
Mierda, los rumanos... pensé para mis adentros. Uno de ellos empujó a la mujer hasta el mostrador.
Por favor, no me hagan daño, tengo un bebe en mis brazos - dijo llorando - no me hagan nada, por favor
No le haremos nada si aqui el amigo se porta bien con nosotros - dijo uno - serias tan amable de darnos el dinero
Aqui está , llevenselo todo... - dije abriendo el cajetín de la registradora y apartándome a un lado. El más alto de los tres, con una cicatriz en la mejilla y una poblada barba se quedó mirando el dinero. Después me miró fijamente, puso una media sonrisa y se acercó a mi lentamente.
Es lo que tengo - le dije mientras mis piernas comenzaban a temblar de lo nervioso que estaba.
Casí sin darme cuenta aquel hombre me agarró por el pelo para acto seguido comenzar a sacudir mi cara contra el mostrador repetidamente. Sentí que mi nariz se rompía en mil pedazos desde el primer golpe. Era como si me hubiesen clavado cientos de agujas en ella y la sangre comenzó a salpicarlo todo.
Está bien, esta bien, tranquilo - dije intentando controlar la hemorragía taponando mi nariz con una mano mientras con la otra retiraba rápidamente el último cajón del mostrador para coger la caja metálica - por favor... aqui dentro hay 2000 euros, no tengo más, es lo que dejó mi jefe... se lo juro
¿Me lo juras? - dijo aquel hombre de la barba con acento extranjero quitándome la caja de las manos violentamente - ¿sabes lo que te pasará si abro la caja y no hay dinero?
Mi jefe dijo que había 2000 euros - dije yo sin poder controlar el sangrado - mi jefe me lo dijo...
¡Ábrela!  - ordenó aquel hombre a uno de sus acompañantes tirándole la caja. Este la puso en el suelo y comenzó a golpearla con una gran maza metálica que llevaba oculta bajo la chaqueta.
Por favor, no me hagan daño, mi bebe... - dijo aquella mujer dejándose caer al suelo, asustada por el ruido de los mazazos.
A tu bebe no le pasara nada si dentro de la caja encontramos lo que buscamos - dijo uno de aquellos hombres. Justo en ese momento la caja se abrió y unos recortes de periódico salieron de ella. El de la barba vació completamente la caja en el suelo y no había rastro del dinero, sólo recortes. Giró su cabeza y me miró con odio. El hombre de la maza golpeo el mostrador rompiendo el cristal que lo cubría.
No me gusta perder el tiempo - dijo aquel hombre también con acentro extranjero mientras me empujaba violentamente contra la pared - y mucho menos que me engañen. El proximo mazazo ira directo a tu cabeza si no nos dices donde está el dinero.
Te estás equivocando con nosotros - dijo el de la barba acercándose - deja de engañarnos, piensa que somos capaces de hacer cualquier cosa para que nos des lo que queremos...
El que había estado callado hasta el momento saco un pitillo de uno de los bolsillo de su cazadora y lo encendió dandole una larga calada. Después dejó que el humo calentara sus pulmones un rato antes de expulsarlo.
¿Qué miras, gilipollas? - me preguntó - ¿no se puede fumar aqui? ¿ley antitabaco? tranquilo.. no es tabaco. La maría me relaja, si no fumara maría no podría controlar mis impulsos... tengo impulsos asesinos.... ¿sabes? debería medicarme... pero no tengo dinero para comprar los medicamentos....
Aquel hombre sacó una pistola de uno de sus bolsillos y se golpeó la frente varias veces con ella mientras saboreaba cada calada que daba. Al rato se agachó junto a la señora que abrazaba a su bebe y arrimó el arma a la manta que lo cubría.
¡No por favor! - gritó la mujer
Dios mio.... - dije yo
¿No querrás que le conceda el sueño eterno a esta pobre criatura? - me dijo mientras salía humo de su boca como si fuera un ente demoniaco salido de una película de terror.
 Por favor - dijo la mujer entre lágrimas - dales lo que te piden, dales el dinero
El hombre de la maza me golpeó en el estómago con el mango dejándome casi sin aliento, haciéndome vomitar sobre mi propia sangre. Otro golpe en el costado me hizo caer de lado sobre el mostrador, empapándome con mi propio vomito, provocándome múltiples cortes con los cristales rotos.
No tienes corazón hijo de puta... - me dijo - prefieres que matemos a un bebe antes que decirnos donde está el dinero... ¡te mataremos a ti también!
En el despacho - dije yo escupiendo sangre - en el despacho hay una caja fuerte.... pero creo que está vacía, el dueño la vacio justo cuando yo entré a trabajar... por favor, no me pegue más... él me engaño, me dijo que había dinero en la caja, no es culpa mia... no es que no quiera darles dinero.... ¡es que no tengo!... coja mi cartera, no hay mucho, llévesela... pero no le hagan daño al bebé....
¿Nos quieres joder? - dijo el hombre de la cicatriz agarrándome de la nariz provocándome un inmenso dolor - no venimos hasta aqui para llevarnos esta mierda. ¿cuanto tienes en la caja registradora? ¿200 euros?
La caja fuerte está vacía  - dijo el de la maza saliendo del despacho - el dueño la dejó abierta para que vieramos que estaba vacía... el cabrón no debia de querer que se la forzaramos...
Hijo de puta  - dijo yo pensando en el Sr. Peleteiro
¿Qué me has llamado? - dijo el de la maza
No, no era por ti... era por - intenté explicarle antes de que la maza golpeara fuertemente mi cabeza tirándome al suelo después de sentir un crujido. Sin duda la maza se me había clavado en el craneo por que le costó sacarla. No podía abrir bien los ojos, la sangre que emanaba del boquete que me acababa de abrir con el golpe se deslizaba por mi cara entrándome en los ojos, molestándome. Lo veía todo borroso. Sentía que me iba a desmayar. Un pitido en mis oidos apenas me dejaba escuchar nada.
Peguemosle un tiro, nos está tomando el pelo - dijo el de la pistola mostrando impaciencia.
No - dijo el de barba sacando un cuchillo - esto hace menos ruido y es igual de efectivo
No tengo más dinero, les estoy diciendo la verdad - dije con la mirada perdida en el infinito
¿Que es esto? - dijo el de barba mirando bajo lo que quedaba del mostrador- una gameboy... ¿es tuya?
Mi gameboy... - dije yo desvariando - es.... mia....
Te gustan los videojuegos... - dijo el de barba entre risas mirando a sus compañeros -¡le gustan los putos videojuegos! entonces no te importara si, por ejemplo, ¿te corto los dedos?
Mi gameboy... - dije yo - me gusta mi gameboy... tengo que matar a Dahos...
Los compañeros del de la barba comenzaron a reirse ante mi absurdo comportamiento.
Si, es una buena idea - dijo el de la maza animándole - córtale los putos dedos
Veamos... si te corto el pulgar izquierdo... ¿como manejaras la cruceta? - dijo aquel hombre  arrimándome el cuchillo - y si te corto el derecho... bueno, te quedan mas dedos para pulsar los botones... mejor el izquierdo ¿o te corto la puta mano derecha?
Mi juego... Dahos..... - dije otra vez, conmocionado por el golpe recibido mientras perdía abundante sangre
Mira chico, o nos dices donde está el dinero... o te dejo sin pulgares... te lo digo muy en serio... no bromeo - dijo colocando su afilado cuchillo sobre mi pulgar izquierdo y mirándome fijamente sin pestañear
Dahos... tengo que matar a Dahos... - repetía yo una y otra vez
A la mierda, tu te lo has buscado - dijo aquel hombre haciéndole un gesto con la cabeza al loco de la pistola. Esté le dio un fuerte golpe con el pie al cuchillo apoyado sobre mi pulgar izquierdo, cortándolo, dejándolo unido a mi mano por apenas un trozo de piel.
Mataré al bebe y a la chica - dijo el pistolero fumador de maría - ¡me estás cansando!
Yo levante mi mano izquierda para ver como se habia convertido en otra fuente de la que emanaba sangre, intentando colocar el dedo otra vez en su sitio.
Se cae... - dije yo - igual con celo... ¿pueden darme celo? Estaba en el mostrador que han roto...
Este tio esta chalado, el golpe en la cabeza lo ha dejado completamente tarado - dijo el de la barba guardando su cuchillo - coger su DNI y vámonos de aqui. Coged todo lo que nos pueda ser útil... si tuviera dinero ya nos lo habría dado...
Yo me llevaré esto para mi hijo - dijo el de la maza cogiendo la gameboy
En aquel momento cometí uno de los errores mas importantes de mi vida, llevado por la locura provocada por el golpe en la cabeza. A los coleccionistas de videojuegos nos pueden pasar cienmil cosas malas, pero no hay nada peor que ver como te roban ese juego que tanto te gusta y tanto te costó conseguir. Eso tan sólo lo entendemos los coleccionistas.
Espera - dije yo  levantándome del suelo y agarrándo al de la maza por el brazo - llévate la gameboy pero déjame el juego, aún no lo terminé...
Estas jodido tio... - dijo - como te atreves a tocarme...
¡Dámelo! - le grité a la vez que lo empujaba contra una estantería tirándolo al suelo. Los demás me miraban asombrados. Me tiré sobre el agarrándole por el cuello mientras mi sangre le caía en la cara. Mi mano izquierda se volvía loca intentando apretar su cuello... pero el pulgar cortado resbalaba una y otra vez. El de la barba tuvo que agarrarme para separarme de su compañero, lanzándome contra el mostrador de una patada. Yo me incorporé rápidamente sacando fuerzas de mi locura pasajera.
El de la maza intentó golpearme otra vez pero esta vez esquivé el golpe agachándome y empujándole de nuevo con fuerza. Esta vez aquel hombre cayó sobre su compañero de la pistola golpeándole en la cara de lleno con la maza, empujando a su vez a la mujer que del golpe dejó caer a su supuesto bebé al suelo, dando vueltas, sin vida.
¡Mierda! - gritó el fumador dolorido mientras su compañero de la barba se reía asombrado por mi comportamiento- ¡pedazo de cabrón! ¡te has vuelto loco!¡te voy a meter un tiro en la puta cabeza!
Eso... no es un bebe.. - dije yo - es.... un muñeco... es un muñeco... no lo entiendo
¿No lo entiendes...? ¡eres un gilipollas! - dijo la mujer recogiendo el muñeco del suelo - ya os dije que esta tienda no era buena idea, que de aqui no sacaríamos nada...
¡Cállate! - gritó el hombre de la barba - esta vez no nos has servido de nada tu truco de madre desesperada por que le van a hacer daño a su bebé...
¿Donde está tu acento? - le pregunté yo tambaleándome - ya no hablas con acento rumano...
Los tres hombres y la mujer se quedaron mirándome como si hubiera dicho algo malo.
Esta bien - dijo el de la barba - no somos rumanos, somos españoles.... como tú
¿Sorprendido verdad? - dijo el de la maza mirándome con odio.
La puta crisis nos obliga a hacer esto - dijo el de la barba - nos hacemos pasar por rumanos para que la gente nos tema y sobre todo, para que no nos busquen a nosotros, a un grupo de españoles que se ha visto obligado a tomar medidas extremas para sobrevivir.
Bueno, yo estoy un poco loco sabes, hago esto más por diversión que otra cosa... yo ya estuve en la carcel - dijo el de la pístola mirando a sus compañeros como riéndose de ellos - por violación, por robo con violencia, por drogas... y ahora estaré otra vez... ¡por trabajar con gilipollas!
Callate, no necesita saber eso - dijo el de barba mirando a su alrededor - vamonos de una puta vez, no hay cámaras, tal como imaginábamos, no hay nada que limpiar
¿estuviste en la carcel por violación? eres un hijo de puta - dijo la mujer
Tranquila, tu no me interesas lo más mínimo, perra - dijo el de la pistola riendo
No te pases - dijo el de barba mostrando su cuchillo
Uy perdón... es verdad... ¡es tu perra! - gritó
No debería haber entrado en este grupo - dijo el de la barba mirando al de la maza - tu amigo está mal de la cabeza... es la primera y la última vez que nos acompaña
Acaba de salir de la carcel, antes no era asi - dijo - antes no eras así ¿que te ha pasado?
No.... ¿que nos está pasando? - dijo apuntando a su compañero del cuchillo  - este cabrón nos descubre por un puto videojuego de mierda, nos agrede y ahora nos enfrentamos entre nosotros. Eso no puede ser.
Aquel hombre me golpeó en la cara con el arma, seguramente el pómulo se me hizo añicos, pero me dolió más cuando, después de caerme al suelo, me rompió varias costillas con sus patadas.
¡Vale ya! es hora de irse - gritó el de la maza agarrando a su compañero
Este tio nos puede descubrir, puede destruir nuestro montaje sobre la banda de ladrones rumanos, no podemos dejarlo asi - dijo el de la pistola
Eso es cosa tuya, yo no quiero saber nada - dijo el de la barba - y creo que los demás tampoco
Esto es de locos... somos ladrones, no asesinos.... - dijo la mujer - ¿piensas que nos va a delatar?
Puede aportar datos nuevos a la policia.... ellos están buscando a una banda de rumanos... este hombre ha sido el único que ha descubierto que no lo somos - dijo nervioso el de la pistola - no somos asesinos dices... habla por ti mujer... yo ya he matado antes y mataré de nuevo para evitar volver a la carcel, no tienes ni puta idea de quien soy yo... ¡ni puta idea!
La mujer se agachó y me agarro por el cuello, llenándose las manos de sangre.
¡Escuchame bien friki de los cojones.... si dices algo, si se te ocurre decir algo.... no sólo iremos a tu casa para acabar contigo... acabaremos con toda tu familia...! - gritó histérica meneando mi cabeza de un lado a otro.
Puedes devolverme el juego por favor... puedes darme mi juego - le dije con lágrimas en los ojos
¿Quieres tu juguetito? - me dijo el de la pistola apuntándome - toma tu juguetito. Game over gilipollas.
Escuché un disparo y una bala penetró caliente en mi cabeza. La mujer me soltó sorprendida.
¡Estás loco! - gritó la mujer - ¡estás locó!
El de la barba agarró a la mujer mirando al de la pistola con odio.
Vamonos de aqui - le dijo
Me estaba tocando las pelotas - dijo el de la pistola apuntando a sus compañeros uno a uno - y nadie me toca las pelotas.... ¡nadie!
¿qué has hecho tio... que has hecho? - le dijo el de la maza antes de empezar a correr hacia la salida
 La verja se abrió violentamente y abandonaron la tienda. Pude escuchar el sonido de un coche abandonando el lugar a toda prisa. Me quedé solo, tirado en el suelo del puñetero 24 horas, en un charco de sangre mezclada con vomitos. Todo se volvió blanco hasta que llegaron las luces de colores...

3 comentarios:

  1. SIGUE EN SU LINEA, ME MOLA LA OSTIA ESTA HISTORIA, QUIZA LA UNICA PEGA QUE LOS ATRACADORES SE CUENTEN SU VIDA DELANTE DEL QUE VAN A ATRACAR, PERO DEL RESTO PERFECTO, OTRA PUTADA ES QUE LA TERMINES ASI Y ME DEJES CON LAS GANAS CABRONAZO..... XD

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  2. No se cuentan su vida. Tienen una discusión generada por los nervios ya que el atraco no está saliendo nada bien y por que de los atracadores, hay uno, el de la pistola, que además de ser nuevo en el grupo, está completamente loco y acaba pasando lo que pasa. Tampoco creo que hablen tanto entre ellos. Si no me anduvieran a meter prisa para que escriba igual lo hacia mejor... capullo... xD

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  3. "No debería haber entrado en este grupo - dijo el de la barba mirando al de la maza - tu amigo está mal de la cabeza... es la primera y la última vez que nos acompaña"

    He añadido la parte final a este parrafo para que quede claro que era la primera vez que el loco de la pistola iba con ellos y no había participado en los anteriores robos.

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